La primera molécula del universo, que se cree creada después del Big Bang, se ha detectado en el espacio por primera vez.
El hidruro de helio (HeH), una combinación de helio e hidrógeno, fue detectado a unos 3000 años luz de la Tierra por un instrumento a bordo del observatorio estratosférico en vuelo para la astronomía infrarroja (SOFIA), un telescopio integrado en un avión 747 convertido que vuela sobre la parte opaca de la atmósfera terrestre.
Aunque HeH +, el ion hidruro de helio, se ha propuesto durante años como la primera molécula, los científicos no pudieron encontrar ninguna evidencia de su existencia en el espacio, hasta ahora. Los hallazgos fueron publicados el miércoles en la revista Nature.
Después del Big Bang, HeH + se formó en un enlace molecular cuando los átomos de helio y los protones se combinaron. Más tarde, estos se romperían en moléculas de hidrógeno y átomos de helio. Ambos elementos son los dos más abundantes en todo el universo, con hidrógeno primero y helio segundo.
En 1925, los químicos sintetizaron HeH en el laboratorio. En la década de 1970, los teóricos predijeron que la molécula podría existir en las nebulosas planetarias, nubes de gas expulsadas por estrellas similares al sol. Pero décadas de observaciones no lograron encontrar ninguna, arrojando dudas sobre la teoría.
El ion molecular se forma cuando la radiación de la estrella, que alcanza temperaturas de más de 100.000 grados, ioniza la nebulosa.
La opacidad de la atmósfera de la Tierra descarta cualquier telescopio terrestre.
Por eso los investigadores utilizaron SOFIA, el Observatorio Estratosférico para la Astronomía Infrarroja, un jet Boeing modificado que lleva un telescopio que puede volar por encima de la atmósfera inferior.
Un espectrómetro de alta resolución llamado GREAT a bordo de SOFIA detectó la molécula en la nebulosa planetaria NGC 7027.
El descubrimiento prueba que el hidruro de helio puede existir en el espacio y confirma las teorías sobre la química del universo primitivo y su evolución.