El Congreso de los Estados Unidos aprobó el jueves un proyecto de ley bipartidista para suspender el techo de la deuda, evitando un incumplimiento histórico de las obligaciones del país.
El proyecto de ley, que fue aprobado por el Senado con una votación de 63-36 y la Cámara de Representantes con una votación de 314-117, eleva el techo de la deuda en $31,4 billones, suficiente para cubrir las necesidades de endeudamiento del gobierno hasta fines de 2023.
Con esta legislación, el límite legal de endeudamiento federal se suspenderá hasta el 1 de enero de 2025.
El senador Bernie Sanders votó en contra del proyecto de ley bipartidista para suspender el techo de la deuda debido a la inclusión de un gasoducto de energía, requisitos de trabajo extra para algunos destinatarios de cupones para alimentos, y los cortes de fondos a “programas de nutrición, programas de vivienda, y programas que la gente común necesita desesperadamente».
El proyecto de ley fue un compromiso entre el presidente Biden y el presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, y generó la oposición de 71 republicanos de línea dura.
La votación se produjo después de semanas de negociaciones entre demócratas y republicanos, que se habían estancado en el tema. El impasse había planteado el espectro de un incumplimiento, lo que habría tenido consecuencias devastadoras para la economía estadounidense.
En un comunicado, el presidente Joe Biden elogió la aprobación del proyecto de ley y dijo que “garantiza que Estados Unidos seguirá cumpliendo con sus obligaciones y evitará un incumplimiento catastrófico”.
“Este es un buen día para Estados Unidos”, dijo Biden. «Evitamos un incumplimiento que habría sido devastador para nuestra economía y nuestra gente».
El techo de la deuda es un límite legal sobre la cantidad de dinero que el gobierno de los Estados Unidos puede pedir prestado. Fue promulgada en 1917 como una forma de evitar que el Congreso gaste en exceso.
Sin embargo, el techo de la deuda se ha elevado docenas de veces a lo largo de los años, ya que el Congreso no ha estado dispuesto a permitir que el gobierno incumpla sus obligaciones.
El último aumento en el techo de la deuda se produce en un momento en que la economía de los EE. UU. se enfrenta a una serie de desafíos, que incluyen una alta inflación y el aumento de las tasas de interés.
La administración de Biden advirtió que un incumplimiento tendría un «impacto severo» en la economía, lo que conduciría a tasas de interés más altas, precios de acciones más bajos y pérdidas de empleos.
La aprobación del proyecto de ley de límite de deuda es un alivio para la administración Biden y la economía estadounidense. Sin embargo, es probable que el problema vuelva a surgir en el futuro.
El techo de deuda se refiere al límite legal establecido por el Congreso sobre la cantidad de deuda que el gobierno de los EE. UU. puede acumular para financiar sus operaciones y cumplir con sus obligaciones. El tope sirve como mecanismo para garantizar la responsabilidad fiscal y evitar el endeudamiento excesivo.
A medida que EE. UU. se acercaba al techo de la deuda, aumentaba la urgencia de llegar a una resolución. No elevar el techo de la deuda habría puesto al país en riesgo de incumplimiento de sus obligaciones financieras.
La aprobación del proyecto de ley por el Senado y su inminente firma por parte del presidente Biden solidifica la medida y evita que Estados Unidos incumpla sus obligaciones financieras.
Al aumentar el límite de endeudamiento, el gobierno puede continuar pidiendo fondos prestados para cumplir con sus obligaciones, como el pago de facturas y el servicio de la deuda existente.
Esta acción brinda certeza a los mercados financieros, mantiene la solvencia del país y ayuda a salvaguardar la economía en general. Es un paso crucial para mantener el buen funcionamiento de las operaciones del gobierno y evitar consecuencias potencialmente desastrosas.
La aprobación del acuerdo sobre el techo de la deuda demuestra la capacidad del Congreso para unirse y abordar cuestiones críticas que afectan la estabilidad financiera de la nación. Destaca la importancia de la cooperación bipartidista y el compromiso para garantizar el bienestar del país.
El impasse había aumentado el riesgo de incumplimiento, lo que habría desencadenado una cascada de problemas económicos, incluido un fuerte aumento de las tasas de interés, una caída en el valor del dólar y una recesión.
La aprobación del proyecto de ley es un alivio para los mercados y las empresas, que se habían estado preparando para un incumplimiento. También le da a la administración Biden un respiro para enfocarse en otras prioridades, como la economía y la guerra en Ucrania.
Sin embargo, el techo de la deuda no es una solución permanente. El gobierno deberá volver a elevar el techo de la deuda en los próximos meses o años.
No está claro si los demócratas y los republicanos podrán llegar a un acuerdo a largo plazo sobre el techo de la deuda o si el tema se convertirá en una fuente recurrente de estancamiento político.
Mientras tanto, la aprobación del proyecto de ley es un alivio bienvenido para la economía estadounidense. Es una señal de que, a pesar de sus diferencias, demócratas y republicanos todavía están dispuestos a trabajar juntos para abordar los problemas más apremiantes del país.