Decenas de personas murieron y unas 150 resultaron heridas en un presunto atentado suicida contra agentes de policía en una mezquita en la ciudad de Peshawar el lunes, en el noroeste de Pakistán.
El número de muertos aumentó a 90 el martes, dijo un funcionario del hospital, y que 57 personas estaban siendo atendidas, 7 de las cuales se encontraban en estado crítico.
Un portavoz del Hospital Lady Reading en Peshawar dijo el lunes que al menos 32 personas han sido confirmadas muertas y más de 70 heridos que han sido atendidos.
Alrededor de 300 fieles estaban en la mezquita en el momento de la explosión, dijo Ijaz Khan, jefe de policía de Peshawar.
Nadie se ha atribuido la responsabilidad del bombardeo, que destruyó la mezquita durante las oraciones del mediodía y provocó el derrumbe de un muro sobre los fieles.
El edificio está ubicado dentro de un complejo altamente fortificado que incluye la sede de la policía provincial y un departamento antiterrorista de la ciudad noroccidental de Peshawar.
En marzo del año pasado un atentado suicida en una mezquita musulmana chiíta durante las oraciones del viernes mató al menos a 58 personas e hirió a casi 200.
Los militantes del Estado Islámico se atribuyeron la responsabilidad de ese atentado.
Peshawar, que se encuentra en el borde de los distritos tribales de Pakistán que limita con Afganistán, es blanco frecuente de grupos militantes, incluidos los talibanes paquistaníes.
Pakistán, un país del sur de Asia de más de 230 millones de habitantes, se enfrenta a una crisis económica agravada por las catastróficas inundaciones del verano pasado.
La semana pasada, una falla en la red eléctrica dejó a gran parte del país sin electricidad durante la mayor parte del día.
El gobierno de Khyber Pakhtunkhwa declaró el martes día de luto.
